Sorpresa negativa en los datos de empleo de junio. Los datos de paro y afiliación a la seguridad social se han presentado como siempre como muy positivos. El inicio de la campaña veraniega garantiza cada año que por estas fechas se cree empleo.
Para poder por tanto valorar en términos relativos cómo ha sido este mes de junio para el empleo el dato relevante está en la serie desestacionalizada, que ofrece la variación mensual al margen de efectos estacionales y de calendario (de hecho en EE.UU. las autoridades no dan el dato bruto de empleo sino direcatamente los datos desestacionalizados) y ahi encontramos que en junio se ha roto la tendencia de recuperación de empleo que arrancó a finales de 2013. El paro (en terminos desestacionalizados) sube por primera vez tras 25 meses consecutivos a la baja (en 24 personas) y las altas a la seguridad social caen en 2.104 efectivos, lo que supone el primer descenso desde julio de 2013.
Es verdad que con un dato malo no puede vaticinarse el fin de una tendencia positiva. Una golondrina no hace verano, pero habrá que vigilar la evolución de los próximos meses ya que sería un problema peligroso que la recuperación se frenase justo cuando el Gobierno está empezando a relajar su política fiscal (adelantando recorte de impuestos y aumentando el gasto) lo que podría estresar el cumplimiento del objetivo de reducir el déficit público por debajo del 3% en 2016. De hecho ni FMI ni la Comisión Europea creen que vayamos a conseguirlo.
La tendencia que no cambia es la de la temporalidad del trabajo creado. Del 1.726.117 de contratos firmados en junio, solo 126.856 de ellos fueron de carácter indefinido (el 7,36% del total) y sigue cayendo la cobertura del sistema de protección por desempleo que se ha situado en abril en el 54,46%, frente al 57,71% de un año atrás. Más: http://www.expansion.com/economia/2015/07/02/5595043aca47410d548b4579.html
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